Entre las propiedades de un fluido hidráulico figuran la viscosidad, resistencia a las variaciones de temperatura y resistencia al fuego.
- La viscosidad se refiere a la resistencia al flujo y se determinada por el índice de viscosidad, basado en el cambio de espesor del fluido según las variaciones de temperatura. Es esencial utilizar un fluido con una viscosidad adecuada al equipo: demasiado viscoso, puede provocar pérdida de rendimiento y cavitación; demasiado fluido, aumenta el riesgo de agarrotamiento y rotura.
- La resistencia a las variaciones de temperatura corresponde al rango de temperatura en el que se puede utilizar el fluido sin perder sus propiedades.
- La resistencia al fuego es la capacidad de un fluido para minimizar el riesgo de combustión, evaluada por el punto de inflamación, punto de ignición y punto de autoignición.
Un fluido hidráulico también tiene características medioambientales, así como propiedades de resistencia a la oxidación y al agua.
Estos fluidos hidráulicos pueden contaminarse con partículas, agua o gas, lo que puede comprometer el rendimiento del sistema. Para minimizar estos riesgos, la instalación de filtros adecuados en las distintas partes del circuito hidráulico es una solución eficaz. Para saber más, consulte nuestro artículo dedicado: [...]